En verano puede apetecer un postre que no pase por el horno. Sacamos entonces el robot de cocina (o la Thermomix) y nos ponemos manos a la obra
Para el fondo trituramos unas galletas María mezclándolas con mantequilla (al gusto), Nutella o Nocilla (poca, para darle color) y un puñado de almendras crudas peladas. Una vez triturado y mezclado todo lo ponemos en el fondo de un molde desmontable para tartas y lo nivelamos.
Pasamos entonces al piso superior de nuestra tarta: para ello tendremos que mezclar muy bien queso Philadelphia (que se puede sustituir por mascarpone, pero si queréis hacer una receta más ligera podéis utilizar también el Philadelphia Light), azucar glas y Nutella o Nocilla. Insisto con estas dos marcas porque son las más adecuadas, las otras tienen mucha más grasa y pocas avellanas.
Repartimos este segundo piso y completamos con un piso de frutos secos variados (crudos y pelados, nada de ‘tostados’), pueden ser almendras, avellanas y ¿porqué no? incluso nueces.
¡A la nevera un par de horas y listo!