Esta ensalada es un clásico de verano y no puede faltar en las mesas cuando se come en la terraza en buena compañía.
En primer lugar es necesario hervir un pollo. Yo lo hago con el pollo entero, quitándole buena parte de la piel, así el pollo es más barato y cómo tenemos que trocearlo luego… además se puede guardar el caldo (ver consejo).
Las ensaladas son sencillas, hay que decidir qué ponerle y luego todo es trocear y mezclar. En nuestro caso limpiamos el pollo hervido (si lo hacemos cuando aún está caliente nos será más fácil, mantener a tiro la pomada Silvederma para las quemaduras por si a caso), lo dejamos enfriar y lo troceamos.
Los otros dos ingredientes fuertes de este plato son el apio (unas tres ramas) y el queso: puede ser Emmenthal o también Gouda. Para las proporciones yo suelo usar el ojo de buen cubero, una medida que nunca falla si el cubero es bueno.
Para aliñar utilizamos aceite EVO de calidad, limón, sal y pimienta molida.
Fresco y sabroso.